La artrosis de rodilla es tan común que tiene un nombre distinto: gonartrosis. Otro nombre para esta enfermedad es osteoartritis deformante.
La artrosis de la articulación de la rodilla preocupa al 20% de la población, su código ICD-10 es M17. La mitad de las patologías de rodilla se deben a artrosis. Esta es una enfermedad en la que el tejido del cartílago y la superficie articular se degenera: se desintegran. La articulación recibe pocos nutrientes y oxígeno, su función se deteriora y se produce inflamación. Se vuelve inactivo y duele, la calidad de vida del paciente disminuye. Las complicaciones de la artrosis conducen a una silla de ruedas.
Averigüemos qué es la artrosis de la articulación de la rodilla y cómo tratarla. ¿Cómo se puede prevenir la enfermedad y qué tan peligrosa es?
Causas y clasificación
Las causas de la artrosis de la articulación de la rodilla son diferentes: daño mecánico, predisposición hereditaria, trastornos metabólicos.
La aparición de la enfermedad se asocia con una tensión excesiva en las rodillas. Se trata de una lesión laboral en muchos deportes. Las personas con un alto grado de obesidad, mayores de 60 años, casi siempre presentan artrosis de un grado u otro debido a los constantes microtraumatismos. La artrosis se refiere a enfermedades profesionales en áreas donde una persona tiene que estar de pie o levantar objetos pesados durante mucho tiempo. La enfermedad puede comenzar después de la artritis reumatoide.
La causa más común de artrosis de rodilla es una lesión. El segundo más común es la displasia en la infancia. La inflamación debida a patologías autoinmunes es la tercera fuente de artrosis. Generalmente hay varias razones, una complementa a la otra.
Los tipos de artrosis de la articulación de la rodilla se dividen según las causas en primaria y secundaria. Si se desconoce la etiología, se diagnostica artrosis primaria; si se determina la causa, se diagnostica artrosis secundaria.
Mecanismo de desarrollo
El cartílago se nutre debido a los constantes cambios en la presión osmótica. Cuando se carga la articulación, la viscosidad del líquido intraarticular disminuye y su cantidad aumenta. En estado de calma, el líquido intraarticular se vuelve viscoso y su cantidad disminuye. Normalmente, estos procesos se alternan. La placa de cartílago, actuando como una bomba, cuando está cargada, empuja el líquido fuera de la articulación y, cuando está relajada, lo aspira. Así se nutren los tejidos articulares. El proceso patológico se manifiesta si la articulación está expuesta a influencias destructivas:
- Si la carga es grande y la articulación no tiene tiempo de recuperarse, se altera la nutrición. El cartílago se adelgaza, aparecen grietas y úlceras;
- La estructura de las fibras de colágeno se altera y se absorben peor. El cartílago y la rótula se ablandan, se vuelven inelásticos y empeoran sus funciones;
- Aparecen crecimientos óseos en la articulación. La membrana de la cápsula articular se irrita e inflama;
- A medida que una persona comienza a cuidar su rodilla y se mueve poco, se produce menos líquido intraarticular. La superficie del cartílago se vuelve seca y áspera;
- La rodilla recibe aún menos nutrición, se atrofia y su destrucción se acelera.
Aparecen signos de artrosis de la articulación de la rodilla: se vuelve inactiva y se produce dolor. El dolor es especialmente intenso por la mañana y después de una inmovilidad prolongada.
Etapas de la artrosis
Hay tres grados de artrosis:
- Etapa inicial. Los tejidos aún no han sido destruidos. Hasta ahora, sólo se está deteriorando la función de la membrana sinovial. La composición del líquido intraarticular ha cambiado. La rodilla ya no puede soportar la carga normal;
- El cartílago articular y los meniscos comienzan a deteriorarse. Los osteofitos (formaciones óseas) crecen en los huesos. Aparecen inflamación y dolor;
- Etapa difícil. La plataforma de soporte de la articulación de la rodilla se deforma y el eje de la pierna cambia. Los ligamentos se acortan y la cápsula articular se vuelve rígida. La articulación es patológicamente móvil, pero es imposible doblarla o enderezarla por completo. La inflamación y el dolor son pronunciados.
¡En una nota!
Al comienzo de la enfermedad, los músculos están intactos. Su función se pierde gradualmente. En la tercera etapa, el movimiento está muy limitado. Debido a un cambio en el eje de movimiento, los sitios de inserción de los músculos cambian. Los músculos están deformados: se contraen o se estiran, ya no pueden contraerse normalmente. La nutrición de todos los tejidos de las piernas se ve afectada.
Síntomas
Los síntomas de artrosis de la articulación de la rodilla al comienzo de la enfermedad no se manifiestan de ninguna manera y no obligan al paciente a consultar a un médico. El paciente nota fatiga y dolor, pero no les da mucha importancia.
El signo clásico de artrosis de rodilla es inmovilidad y rigidez en la articulación, sensación de tirón en la región poplítea y dolor después del ejercicio. Es difícil moverse por la mañana o después de un largo período de inmovilidad. El alivio se produce después de que el paciente estira la rodilla, la masajea y camina.
Después de un tiempo, la intensidad y duración del dolor aumentan. Aparece un crujido en la articulación, deja de doblarse y flexionarse por completo. Una persona comienza a cojear al caminar; la mayoría de los pacientes acuden al médico con esta queja. El tratamiento de la artrosis de la articulación de la rodilla generalmente comienza solo en la segunda etapa.
Si no se hace nada, el movimiento sólo será posible con ayuda externa. Cuando el paciente se acuesta, la rodilla le duele menos, pero el dolor suele molestar por la noche.
En la segunda y tercera etapa, la articulación de la rodilla se deforma: los contornos de los huesos están claramente delineados y la parte inferior de la pierna está curvada. Si pone la mano sobre la rodilla, escuchará un crujido al doblarse y enderezarse. Cuando la rótula se mueve, también cruje. El líquido se acumula en la cavidad, la articulación se hincha y los tejidos se abultan.
A medida que avanza la enfermedad, todos los síntomas se vuelven más pronunciados.
Diagnóstico
El diagnóstico de artrosis de la articulación de la rodilla se lleva a cabo de manera integral: se recopila una anamnesis, se prescriben métodos instrumentales y de laboratorio.
Inspección
El médico examina la articulación dañada, mide los huesos y el ángulo de flexión y determina el grado de movilidad de las articulaciones en ángulo.
Análisis
Se envía al paciente a un análisis de sangre general, un análisis de sangre bioquímico y un análisis de orina general.
radiografía
Una radiografía de la articulación de la rodilla es la principal fuente de información para realizar un diagnóstico. En la foto se ve artrosis de la articulación de la rodilla: el espacio articular se estrecha, el cartílago está esclerótico, los huesos están dañados; hay deformación articular, deposición de sal y cambios distróficos. Los osteofitos son claramente visibles en la imagen.
¡Bueno saber!
Para la artrosis de origen traumático, las radiografías tienen un gran valor diagnóstico y deben realizarse.
Ultrasonido
El diagnóstico por ultrasonido es un método informativo. La ecografía no sustituye a los rayos X y no proporciona una imagen de la naturaleza del proceso destructivo en la articulación.
resonancia magnética
La resonancia magnética proporciona una imagen completa de la enfermedad. Este es un método de investigación moderno y preciso que le permite realizar un diagnóstico en una etapa temprana. La desventaja de la resonancia magnética es su alto costo.
Tratamiento
El tratamiento de la articulación de la rodilla con artrosis se realiza de forma ambulatoria, no se requiere hospitalización.
Régimen de tratamiento:
- Reduzca la carga tanto como sea posible;
- Respetar el modo de circulación prescrito;
- Realizar ejercicios terapéuticos.
El objetivo del tratamiento es ralentizar el proceso de destrucción, prevenir contracturas (la incapacidad de doblar y estirar completamente la pierna) y restaurar la función de la articulación si es posible. Durante el período de rehabilitación, la estancia en sanatorios y resorts muestra buenos resultados.
Drogas
Sólo el médico decide cómo tratar la artrosis de la articulación de la rodilla. No puede seleccionar medicamentos por su cuenta.
La inflamación se alivia con AINE (antiinflamatorios no esteroides).
¡Bueno saber!
Dado que la artritis causa un dolor intenso, las inyecciones de AINE proporcionan un efecto rápido y una sensación de alivio.
El tratamiento moderno de la artrosis de rodilla implica el uso de AINE de otro grupo. Su efecto es más pronunciado.
Si hay inflamación del revestimiento de la articulación, el médico prescribe hormonas corticosteroides para administración intraarticular. La hidrocortisona, Kenalog, Diprospan alivian la inflamación y el dolor, pero tienen muchas contraindicaciones.
Si es necesario, se inyectan sustancias antienzimáticas en la cavidad articular: contrical, ovamine, gordox. Pueden ralentizar significativamente el proceso destructivo.
También se prescriben inyecciones intraarticulares de ácido hialurónico y sus preparaciones. Restaura las propiedades protectoras y amortiguadoras del líquido sinovial.
A menudo se recetan condroprotectores, pero no hay evidencia de que ayuden.
Fisioterapia
Los métodos más nuevos para tratar la artrosis de rodilla no excluyen la carga adecuada. El objetivo de la fisioterapia es proporcionar la cantidad necesaria de movimiento, pero no sobrecargar la articulación, manteniendo el equilibrio. Si el paciente no comprende cómo tratar la artrosis de la articulación de la rodilla, cuando es necesario proteger la rodilla y desarrollarla simultáneamente, el resultado de otros métodos se reduce drásticamente o se reduce a cero. Es posible deshacerse de la enfermedad si el paciente está consciente.
Láserterapia y fisioterapia.
El tratamiento con láser y los procedimientos fisioterapéuticos han demostrado ser excelentes, especialmente si pudieron comenzar desde la primera etapa.
Otros metodos
Los bloqueos intraóseos proporcionan un efecto terapéutico, rompiendo el ciclo de inflamación. Junto con el bloqueo, se utiliza electromioestimulación multicanal mediante un dispositivo especial.
Las compresas hechas con ungüentos y masajes caseros pueden aliviar el dolor y la hinchazón.
Prótesis
Si es necesario, se realiza una operación: al paciente se le coloca una endoprótesis de articulación de rodilla. Los métodos protésicos modernos permiten a los pacientes volver a practicar deportes.
Medicina alternativa y tradicional.
Los defensores de este enfoque poco convencional argumentan que es posible eliminar los síntomas y tratar la artrosis de la articulación de la rodilla únicamente con sus métodos, sin recurrir a medicamentos. Esto es kinesiterapia (un conjunto especial de ejercicios), ozonoterapia (fisioterapia con ozono, que se inyecta en la articulación), homeopatía, tratamiento con suplementos dietéticos, terapia manual, masajes.
¡Atención!
Al utilizar métodos no convencionales, debe recordarse que su eficacia no ha sido probada.
Existen métodos de tratamiento originales, pero las revisiones sobre ellos varían.
Rehabilitación y prevención
Solo los ejercicios terapéuticos y la carga medida en la articulación pueden restaurar la articulación de la rodilla con artrosis. Si el paciente sigue todas las recomendaciones del médico y está dispuesto a luchar por su salud por todos los medios, en la mayoría de los casos la respuesta a la pregunta "¿se puede curar la artrosis de la articulación de la rodilla? " es positiva.
La prevención consiste en la asistencia oportuna de las lesiones, el movimiento activo sin sobrecarga y el mantenimiento de un índice de masa corporal óptimo.
Opiniones de pacientes
Las revisiones de pacientes que se han sometido a un tratamiento tradicional suelen ser positivas, pero también las hay negativas.
Al tomar una decisión final sobre el tratamiento, debe consultar a su médico sin formarse una opinión basada en revisiones.
La medicina ha aprendido a tratar con éxito las enfermedades de las articulaciones, cuyas consecuencias en el siglo pasado condujeron inevitablemente a la discapacidad. En caso de artrosis de la articulación de la rodilla, es importante buscar ayuda a tiempo para determinar el estadio de la enfermedad y el alcance del tratamiento.